Lee Efesios 5:13-14

Para que logre verse la imagen capturada por una cámara en una película es necesario exponerla a la luz. La luz revela las siluetas “pegadas” al negativo. Esta idea es la que plantea Pablo cuando le dice a los Efesios que “todas las cosas se evidencian por la luz de Cristo”. 

Estamos respondiendo a la pregunta ¿cómo conducirme como un hijo de luz? 5:1-14.

En los versículos 13 y 14, podemos analizar que la luz, es Cristo y la Palabra de Dios.

¿Tengo áreas oscuras en mi vida? Necesito exponerme a la luz para que sean evidenciadas. La luz es Dios, es Cristo, es su Palabra.

Según estos versículos, la luz, manifiesta todas las cosas.

Lee Juan 3:19-21, ¿cuál es la actitud, en relación a la luz, de quien anda haciendo lo malo?

Piensa, si quien hace lo malo, se aleja de la luz, ¿de quién se está alejando?

Efesios, por el contrario, nos invita a que nos acerquemos a Cristo para ser iluminados por su luz. Me acerco a Cristo a través de un encuentro diario con la Palabra

En ese encuentro serán evidenciadas mis “zonas oscuras”: mi pecado, mis heridas, mis rencores, mis temores, mis frustraciones…que necesitan ser iluminados por la luz de Cristo para que se produzca un cambio y que yo también pueda ser luz. El deseo de Dios es que no haya tinieblas en mí, sino que todo mi ser sea luz.

Reflexiona:

¿Crees que necesitas ser iluminado con la luz de Cristo y de su Palabra en algún área de tu vida?

¿Cuál? ¿Por qué?

¿Estás exponiéndote a la luz de Cristo y de su Palabra diariamente?

No hay otra manera de ser iluminado sino a través de la Palabra; si no te expones a ella, tus áreas oscuras seguirán siendo oscuras siempre.

Termina orando así: 

Señor, tú eres luz y la luz ilumina las tinieblas. Te pido que ilumines mi vida para que descubras las tinieblas que hay en mí. Descubre el pecado y los desajustes emocionales en mi vida, estoy dispuesto(a) a ser corregido(a) y sanado por ti. Lléname de tu luz.

Ser “iluminado” implica, de tu parte, acércate a Cristo y su Palabra.

Por, Isabel Orozco