Lee: Efesios 1:15-23

Primera oración de Pablo por los efesios: 1:15-23. Pablo, en su carta, escribe dos oraciones que hace por sus discípulos en los efesios. En ellas expresa de qué maneras está interesado él en que ellos crezcan o conozcan más a Dios. En esos mismos aspectos Dios quiere que su iglesia crezca y le conozca a él hoy. Veamos cuáles son.

v. 15 Los efesios se caracterizaban por tener fe en Dios y por amarse unos a otros

v. 16 y esto era el motivo de la oración de Pablo por ellos, empezaba por dar gracias.

Además de agradecer, en el versículo 17, Pablo pedía para ellos de parte de Dios, un espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de Dios.

“Conocer” a Cristo aquí, no es conocimiento intelectual, es “tener una relación íntima con él”.

Recordemos que todo esto lo pidió Pablo para los “hombres de fe” del versículo 15, para quienes llevaban 3 a 10 años de haber conocido a Cristo y su evangelio. Parece que Pablo se preocupaba porque ellos conocieran al Señor en una dimensión más profunda, más cercana, más íntima cada vez.

Lee los siguientes versículos y descubre ¿para qué pedía entendimiento? ¿qué debían entender?

·         v. 18 b

·         v. 18 c

·         v. 19

El poder que actúa en nosotros, es el mismo poder que (v. 20 a) resucitó a Cristo, (v. 20 b) lo puso en los lugares celestiales, y (V.21) lo puso sobre todo principado y autoridad y poder y señorío.

Lee, Romanos 6:3-4

Hoy hemos resucitado a una vida nueva por la obra de su poder que transforma la muerte en vida.

REFLEXIONA

¿Qué área de tu vida necesita resucitar a una vida abundante?

¿Eres como un muerto que no “escuchas” el consejo de la Palabra?

¿Qué área de tu vida no quieres rendir a su autoridad?

¿Qué prácticas y formas de pensar tienes que chocan con la voluntad de Dios?

Él tiene el control y te lo dio a ti, ¿qué emoción, pasión o pensamiento te controla?

No podemos decir que es imposible salir de tal situación o pecado; el mismo poder que actuó en Jesús, actúa en nosotros. El punto es: decidir vivir la vida que él ya peleó y ganó para nosotros. No te conformes, cruza la barrera.

“El principio de unas emociones, pasiones y pensamientos controlados es que yo esté sometido(a) a él”. Cristo es la cabeza.

Pon en oración los aspectos en los que hoy Dios te ha hablado. Pon tu voluntad en línea con la de él.

Por, Isabel Orozco